Lo prometido es deuda.
No imaginé que tardaría todo este tiempo en hacer una entrada con las Cataratas del Iguazú, lado brasileño.
Pero un día por otro, y ocupada en otros menesteres, fue postergándose sin proponérmelo.
Aquí dejo algunas imágenes.
Estas fotos ya forman parte de mis mejores recuerdos, y aunque ahora hay cámaras digitales con una gran precisión, todavía no existe ninguna que atesore las vivencias del momento que nuestras retinas miraron por primera vez tanta majestuosa naturaleza.
Saludos a mis ex-compañeras de informática de 2do. año, a nuestro profesor Ángel y para todas mis amigas.
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